Se acaban los calificativos.

Campeonato Nacional de Liga.
Jornada 12.
Getafe 3- Atlético de Madrid 2 (Da igual quien marque los goles).
Nueva derrota. Ni fútbol, ni coraje, ni ganas....

Escribo después del calentón de anoche, tras leer/ver/escuchar a los profesionales de la prensa y habiendo rumiado la humillación que me supone ir por la calle viendo la sonrisa bobalicona de personas a las que ni les gusta el fútbol, ni son aficionados a un equipo en concreto pero que te recuerdan que tu equipo es una mierda….

Podría escribir sobre el partido de anoche en Getafe, donde el colista de la categoría nos chuleó sin apenas esfuerzo. Podría escribir del partido de Bilbao, donde los dos equipos que se enfrentaron se miraron a la cara y, futbolísticamente hablando, dieron un espectáculo digno de mención. Incluso podría escribir del partido de Liga que se jugó a las 12 de mediodía, donde, contra uno de los contendientes, a esa misma hora, nuestro "simulacro de equipo" apenas pasó del empate a fianles de Agosto, pero no lo voy a hacer.

Podría escribir de la inutilidad de nuestro entrenador, de su paroxismo ante las adversidades, de mi opinión de su función dentro del “Cluz”, o qué, si un en lugar de ser un pusilánime, fuese un tío con dos cojones, anoche hubiese montado en cólera ante el penalti que nos indicaron tras el empate a 2. De si es necesario que venga Luis Aragonés, “Cholo” Simeone o Schuster, pero no lo voy a hacer.

Podría escribir de si hay futbolistas que no merecen vestir la camiseta de este equipo, de cómo a un chaval de la cantera se le humilla haciéndole entrar al campo con un partido con el resultado adverso, de cómo futbolistas con aptitud se convierten en futbolistas sin actitud, pero no lo voy a hacer.

Podría hablar de los 24 años de ruina en la gestión de la familia Gil junto al cooperante necesario llamado Enrique Cerezo, pero no lo voy a hacer.

Estoy hastiado, cansado, decepcionado. Llego a creer que estar en contra de la "Gestión Gil" es hasta contraproducente para los que pensamos así. Lo fácil es mirar para otro lado, hacerse el tonto, idolatrar a Torrente, coleccionar los cupones para la caja de herramientas y la maqueta del Calderón, cantar y bailar el “Pipilastrum” hasta desfallecer, incluso pensar que el partido de anoche es uno mas dentro de la historia del “Pupas”….

Ahora más que nunca, la pelota está en el tejado de la afición. Pienso que la prensa no nos va a ayudar. Ellos tienen bastante viviendo en su mundo de Iniestas y José Tomases, en su mundo de Pichichis y Botas de Oro, en su burbuja donde se debate por Balones de Oro, Villaratos y demás gilipolleces.
Mientras que la afición no levante la voz al unísono, tendremos lo que merecemos….

Ale, a seguir disfrutando de la mediocridad en la que vivimos…. Eso si, no os olvidéis de comprar el periódico para el cupón diario….